Soluciones para Ciudades Inteligentes en un Mundo Cada Vez Más Riesgoso: una mirada a la repercusión de la pandemia de la COVID-19 y las tendencias de las ciudades del futuro

By Andrew Caruso, Jarendra Reddy | 7 de diciembre de 2020

ESI ThoughtLab ha puesto en marcha el estudio de investigación Soluciones para Ciudades Inteligentes en un Mundo Cada Vez Más Riesgoso junto con una coalición de líderes corporativos, académicos y gubernamentales. Hatch es uno de los principales patrocinadores de este estudio y se encargará de evaluar cómo más de 150 ciudades aprovechan la tecnología para impulsar la resiliencia, la sustentabilidad y una perspectiva centrada en los ciudadanos.

En el marco de una particularidad reciente del programa Soluciones para Ciudades Inteligentes en un Mundo Cada Vez Más Riesgoso, se les preguntó a ciertos participantes importantes qué pensaban acerca de la repercusión de la pandemia reciente y las tendencias de las ciudades del futuro. Aquí presentamos algunos aspectos destacados de los expertos de Soluciones Urbanas de Hatch Andrew Caruso y Jarendra Reddy.

La repercusión de la pandemia

  1. En su opinión, ¿cuáles fueron los principales desafíos que afrontaron las ciudades durante la pandemia? ¿Cuáles fueros las lecciones aprendidas determinantes y qué harán diferente las ciudades de ahora en más a raíz de ello?

En un estudio reciente que llevamos a cabo con nuestros clientes, entre ellos, gobiernos municipales, agencias de tránsito, operadores portuarios y aeroportuarios y desarrolladores privados, la gran mayoría dijo que afrontó desafíos importantísimos durante la pandemia de la COVID-19 para continuar operando de forma segura y garantizando los servicios esenciales en medio de fuertes disminuciones de los ingresos. Sin embargo, a pesar de estos desafíos, nuestros clientes señalaron que la pandemia fue también un motor para la innovación e hicieron mención de la adopción de procesos y herramientas digitales para estimular la productividad, acelerar la transformación de las organizaciones y mejorar la participación de la comunidad y las partes interesadas en la planificación de iniciativas y la prestación de servicios. La necesidad aguza el ingenio, y nuestros clientes afirmaron que la pandemia, al igual que otros tiempos difíciles anteriores, se convirtió en una oportunidad para reformular el futuro y lograr mayor fortaleza y resiliencia.

  1. La necesidad de distanciamiento social puso de manifiesto el valor de las soluciones de ciudades inteligentes. ¿Qué soluciones de ciudades inteligentes priorizarán las ciudades a medida que vayan superando la crisis sanitaria? ¿De qué modo replantearán sus prácticas en cuanto a tecnologías, datos, asociaciones y gobernanza?

La tecnología ayudó indudablemente a las ciudades a responder ante la desestabilización masiva que produjo la pandemia y permitió ampliar el alcance, la agilidad y la conexión de los trabajadores en un contexto de riesgos cambiantes y recursos restringidos. Prevemos una mayor adopción digital en al menos tres áreas, a saber:

  • Las tecnologías que brindan soporte a las operaciones y el monitoreo de forma remota
  • Las tecnologías que mejoran la automatización de los procesos, desde la adquisición hasta la prestación de servicios, sobre todo, en los casos de mayor riesgo en cuanto a la salud pública
  • Las tecnologías que optimizan los recursos y la toma de decisiones en tiempo real, tanto para proveedores como para ciudadanos (p. ej., información en tiempo real sobre el volumen de usuarios del transporte público y capacidad disponible)

La recopilación de datos y la consecuente respuesta, ambos en tiempo real, serán cada vez más importantes, ya que las suposiciones y patrones de uso tradicionales evolucionan a largo plazo.

No obstante, hay que tener en cuenta otros aspectos de la próxima ola digital. Si bien las soluciones inteligentes prometen aumentos necesarios de productividad y mayor eficiencia de recursos, hay que recordar que se deben manejar con cuidado para garantizar que mejoren, no que socaven, los niveles de confianza, transparencia y credibilidad de las organizaciones que las usan. La adopción de tecnologías no debe aislar a las comunidades y proveedores de servicios, sino que debe velar por aquellos con diferentes niveles de capacidad y acceso a la hora de garantizar que todos formen parte del mundo digital.

Lea más acerca de nuestro trabajo sobre la importancia de la infraestructura digital.

  1. La pandemia puso de manifiesto la importancia de usar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU como mapa de ruta para el desarrollo urbano. ¿Qué objetivos sociales, ambientales y económicos priorizarán las ciudades como resultado de su experiencia con la COVID-19?

La crisis del sistema sanitario a raíz de la COVID-19 ha evidenciado las vulnerabilidades y limitaciones de capacidad de los sistemas de salud de todo el mundo. Los ODS relacionados con la mejora de la salud y el bienestar a nivel público serán sin dudas el principal foco de atención en las próximas décadas. Sin embargo, creemos que la COVID-19 también ha evidenciado la importancia de diseñar comunidades saludables, es decir, vecindarios transitables con acceso a agua potable, saneamiento e infraestructura digital, un sistema de tránsito que amplíe el acceso y la movilidad, oportunidades económicas sólidas y diversas, y activos ambientales saludables. Estos objetivos están en consonancia con los ODS, sobre todo con el Objetivo 11: Ciudades y Comunidades Sostenibles.

  1. ¿Por qué nuestra investigación Soluciones para Ciudades Inteligentes en un Mundo Cada Vez Más Riesgoso es fundamental para los dirigentes de las ciudades? ¿Qué investigaciones y análisis basados en evidencias deben realizar ahora las ciudades para recuperarse de la pandemia y forjar su futuro?

La necesidad de indagar constantemente en busca de “puntos ciegos” era fundamental incluso antes de la pandemia frente a los crecientes cambios demográficos, tecnológicos, económicos y climáticos. La crisis sanitaria reciente solo ha ahondado en la necesidad de contar con evidencia sólida y cuantitativa para orientar la toma de decisiones y replantear los modelos anteriores. La marcada tendencia a modalidades remotas de trabajo y prestación de servicios, telemedicina, aprendizaje virtual, entre otras modificaciones, cambiará los patrones de consumo y asentamiento en los próximos años. Soluciones para Ciudades Inteligentes en un Mundo Cada Vez Más Riesgoso ayudará a los encargados de tomar decisiones a anticiparse a estas transformaciones y tener en cuenta cómo aprovecharlas para lograr buenos resultados y que el bienestar sea de todos, sin introducir nuevas vulnerabilidades ni dependencias.

Lea más acerca de nuestra labor de mapeo de vulnerabilidades en torno a la COVID-19 en el Reino Unido.

Tendencias futuras

  1. ¿Cómo serán las ciudades en los próximos tres a cinco años? ¿Qué aspectos de vida, consumo, trabajo y movilidad cambiarán en las ciudades? ¿Main Street se verá diferente? ¿Por qué?

La COVID-19 ha consolidado los principios fundamentales de las comunidades saludables y resilientes. La capacidad de satisfacer estas necesidades diarias en un marco local (tiendas de alimentos, educación, oportunidad económica, tránsito, espacios seguros para ejercicio físico y conexión digital) ha demostrado ser esencial para sobrevivir a los eventos de riesgo catastrófico de todo tipo. Nuestro anhelo es que las ciudades evolucionen a fin de adoptar estos “principios fundamentales inteligentes” para construir comunidades dinámicas que no solo sobrevivan, sino que también prosperen.

Además, los factores de impacto y estrés persistirán, lo que nos lleva a pensar que la capacidad de adaptación es la nueva normalidad. Los edificios deberán ser cada vez más flexibles para darles cabida a usos nuevos. Como consecuencia del cada vez mayor comercio electrónico, esperamos que las calles principales encuentren un nuevo despertar en su historia de funciones sociales y cívicas y que logren revitalizarse gracias a los mayores niveles de adopción de medios de transporte no motorizados.

Lea más acerca de nuestras reflexiones sobre el rol del transporte público en el proceso de recuperación posterior a la COVID-19.

  1. ¿Qué técnicas y herramientas utilizarán las ciudades del futuro para alcanzar sus objetivos sostenibles? ¿Qué papel desempeñarán las tecnologías, asociaciones y financiamientos inteligentes en el proceso de mejora de las condiciones sociales, ambientales y económicas?

Las soluciones inteligentes motivarán la transformación tanto en la demanda como en el suministro. La retroalimentación en tiempo real podría ayudar a los consumidores a entender las repercusiones de los patrones de consumo para tomar decisiones individualmente que optimicen el uso de los recursos limitados. Asimismo, los proveedores pueden aprovechar los datos más robustos para evaluar requerimientos futuros e identificar oportunidades para mejorar productos y servicios, lo que genera patrones de consumo y producción más eficientes y de menor impacto. Los análisis de costos del ciclo de vida (life cycle costing) y las evaluaciones de triple objetivo (triple-bottom-line) se han convertido en herramientas importantes que usamos con nuestros clientes para evaluar las repercusiones a nivel social, económico y ambiental de las decisiones y, a la larga, para comunicar estas repercusiones a las partes interesadas a fin de llegar a un consenso y trabajar en aras del progreso.

Si bien las soluciones impulsadas por datos prometen dar respuestas más reflexivas y optimizadas, los modelos de gobernanza deben evolucionar en sintonía con la revolución de los datos. Los conceptos de privacidad y propiedad de datos se van a cuestionar, ya que se plantean cada vez más como la nueva moneda digital.

  1. ¿Cómo utilizarán las ciudades el abanico de asociaciones para alcanzar sus objetivos futuros? ¿De qué modo aprovecharán las asociaciones con empresas, agencias gubernamentales, otras ciudades, empresas emergentes, entre otras entidades, para que esto suceda?

El estado actual de la industria aeronáutica, los actos de delincuencia en los mercados inmobiliarios comerciales y residenciales y el desplome del sector del turismo y alojamiento son ejemplos que dan cuenta de las alteraciones en las relaciones y los modelos comerciales tradicionales. Las “asociaciones” en este contexto implican una reestructuración proactiva de las relaciones en cada elemento de la cadena de valor para preservar esencialmente la viabilidad futura de los mercados clave en nuestra economía.

Además, la repercusión de la pandemia en la salud pública subrayó la interrelación de nuestra sociedad global, lo cual motivó una especie de “innovación profunda” que solo se puede lograr gracias a asociaciones firmes y comprometidas. Los esfuerzos actuales en interés de una vacuna son una muestra del compromiso con la colaboración que traspasa fronteras, disciplinas científicas y modelos comerciales. Todos tienen un papel que desempeñar.

Esperamos que las ciudades resurjan de esta crisis con la misma visión, es decir, con el coraje para replantearse las relaciones y estructuras existentes entre las partes interesadas y priorizar la ambición de generar oportunidades para lograr valor y prosperidad para todos. De manera muy similar a los ensayos de las vacunas, la reinvención de nuestras ciudades será un proceso iterativo. Requerirá análisis cuantitativos y reflexiones cualitativas. Debemos entablar un diálogo en el cual se debatan errores y aciertos en la misma medida, tenemos que intentar dejar de lado los triunfos individuales para celebrar la prosperidad colectiva y debemos aprovechar e inventar nuevas tecnologías a cada paso.