Desafíos

Una finalización deficiente del proyecto, así como fases de preparación lentas, pueden perjudicar seriamente el valor comercial y el del proyecto. Pueden costar a una empresa millones de dólares y hacer disminuir la confianza de los inversionistas. La capacidad de una operación para alcanzar la producción de manera segura y según el cronograma, a la vez que se minimizan los tiempos improductivos, es fundamental para generar el mayor retorno de la inversión de capital.

El comisionamiento es la etapa final en la ejecución del proyecto, y el primer paso para establecer el equipo operativo para alcanzar el éxito. Cualquier ahorro de costos que se haya logrado durante el período de duración del proyecto puede perderse completamente si una instalación no se pone en marcha de manera eficiente y segura, según lo programado. Para hacer esto de manera efectiva, se requiere una estrategia integral, que debe enfocarse en una secuencia de comisionamiento optimizada, que permita que la ingeniería, la adquisición y la construcción generen un inicio más rápido de la producción. Debe hacerlo utilizando estrategias que tengan en cuenta la transición desde el progreso a granel hasta la finalización del sistema en un orden lógico, basado en procesos.

Cuando son ejecutadas correctamente por socios experimentados, estas estrategias de comisionamiento son la clave para reducir los costos relacionados, maximizar el flujo de efectivo y obtener un retorno de la inversión más rápido para las partes interesadas.