Navegando a una transición energética justa: Perspectivas desde Sudáfrica y más allá

Escrito por Mimi Van Noordwyk|July 12, 2024
Navigating-the-just-energy-transition_ppal

Este blog explora lo que implica una transición energética justa y cómo se pueden aprovechar las diferencias y similitudes entre regiones para acelerar el avance del proceso de transición energética.

Energías renovables en Sudáfrica

Los abundantes recursos naturales de Sudáfrica hacen de las energías renovables un punto de partida ventajoso. Dada la abundante luz solar durante todo el año y las regiones costeras a lo largo del Cabo Occidental, tanto la energía solar como la eólica son opciones viables.

Si bien el potencial eólico de Sudáfrica ya se está utilizando, su explotación a gran escala suele encontrar problemas con la infraestructura de la red1.  Debido a restricciones en la ubicación de los parques eólicos, la mayoría de los sitios se encuentran en zonas remotas y tienen dificultades para conectarse a la red. Y, por supuesto, sin una infraestructura de red confiable, se perderá la mayor parte de la energía generada.

La energía solar también posee un enorme potencial de recursos en el país, con miles de millones invertidos en plantas solares y condiciones de sol ideales en muchas regiones del país, pero explotar este potencial no está exento de dificultades. El acceso a financiamiento, los costos iniciales y la infraestructura de la red presentan obstáculos significativos ante la necesidad de un amplio apoyo financiero, lo que lleva a preguntarse cómo pueden las organizaciones privadas alinearse con una transición justa.

Contribuciones del sector privado

En 2015, Sudáfrica fue el único país en mencionar una transición justa en su Contribución Determinada a Nivel Nacional2 (NDC, por sus siglas en inglés). Junto con un Plan Nacional de Desarrollo3 de alto nivel, estas políticas y planes proporcionan una base sólida para el diálogo social y apoyo para definir medidas más tangibles. Realizar evaluaciones de vulnerabilidad por sector y elaborar planes de resiliencia laboral específicos para cada sector también fortalece este enfoque.

Es importante señalar que el Plan de Inversión para la Transición Energética Justa (JET IP) estima necesidades financieras de 98.000 millones de dólares para los próximos cinco años, fondos procedentes tanto del sector público como privado4. Si bien las iniciativas de energías renovables a gran escala dirigidas por el gobierno han enfrentado dificultades, el sector privado ha asumido un papel vital en la configuración del futuro energético del país5, revolución impulsada por instalaciones energéticas más pequeñas y autosuficientes. Al diversificar las fuentes de energía, el sector privado ha demostrado innovación, imaginación y adaptabilidad al más puro estilo sudafricano.

Diversificando las soluciones energéticas

El hidrógeno verde, producido mediante electrólisis del agua a partir de fuentes energéticas renovables, no emite gases de efecto invernadero durante su combustión, lo que lo convierte en una alternativa limpia a los combustibles fósiles. Las pilas de combustible de hidrógeno pueden utilizarse para propulsar vehículos eléctricos, de modo de conseguir mayor autonomía y tiempos de recarga más rápidos que con baterías. También se pueden usar en procesos industriales como la producción de acero y la elaboración de productos químicos. Aunque siguen planteando retos de escalabilidad de producción, almacenamiento e infraestructura de distribución, el amoníaco, con su alta densidad energética, se puede almacenar y transportar eficientemente. En el transporte marítimo, se están estudiando motores propulsados por amoníaco como alternativa a los combustibles de uso marítimo, aunque es necesario abordar ciertas preocupaciones en materia de seguridad y desarrollo de infraestructura.

Dentro de la matriz de energías renovables, la energía a biomasa destaca por su enorme potencial. Utilizada predominantemente para producción de calor, la biomasa es una fuente energética vital para la cocina, la calefacción y los procesos industriales. Puede producir metanol, que a su vez puede convertirse en combustible sostenible de aviación (SAF).

Aunque es indudable que estos combustibles renovables reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, diversifican las fuentes de energía y promueven alternativas más limpias en diversos sectores, su adopción generalizada requiere inversiones en infraestructura, apoyo político y avances tecnológicos que no están necesariamente disponibles en todo el mundo.

Sudáfrica, al igual que muchas otras regiones, se enfrenta al reto de transitar desde los sistemas energéticos tradicionales, dependientes de los combustibles fósiles, a alternativas más limpias. Lo medular de este desafío no es únicamente adoptar las energías sostenibles, sino asegurar un acceso equitativo y un crecimiento económico justo. La solución debe venir de políticas y regulación, del compromiso de las comunidades, incentivos regionales y una inversión inicial adecuada.

El papel de las relaciones para impulsar el cambio

El imperativo de abandonar los combustibles fósiles es el hilo conductor de la transición energética en todo el mundo. Independientemente del lugar, el consenso es claro: las fuentes de energía más limpias y sostenibles son el futuro, y la colaboración, la innovación y la adaptabilidad están al centro de esta transición.

Forjar alianzas sólidas con los clientes, comprender sus dificultades y crear soluciones de manera conjunta son elementos esenciales para sortear las complejidades de la transición. Aunque los conocimientos técnicos son cruciales, es la capacidad de forjar conexiones significativas y navegar los entornos culturales lo que, en última instancia, conducirá a una transición justa y diferenciará a las organizaciones y los proyectos exitosos.

Mientras Sudáfrica y otras regiones del mundo continúan su camino hacia un futuro energético sostenible, la colaboración y el intercambio de conocimientos serán fundamentales. Valorando la diversidad, fomentando la innovación y priorizando la sostenibilidad, los diversos actores podrán dirigir colectivamente la transición energética mundial hacia un futuro más brillante y sostenible.

Comuníquese con Mimi para saber más sobre cómo Hatch aprovecha las diferencias y similitudes entre regiones para acelerar el avance hacia una transición energética justa.

Nuestras perspectivas

Más conversaciones sobre los desafíos más grandes del mundo

Más blogs