Equilibrio entre Emisiones y Producción: Cómo los IROC Revolucionan las Operaciones Mineras para un Futuro Sustentable

Los consumidores actuales buscan un futuro más verde, limpio y descarbonizado. Quieren paneles solares, turbinas eólicas y baterías. Quieren autos eléctricos y electrodomésticos que tengan un menor consumo de energía.

Sin embargo, estas tecnologías y productos requieren metales y minerales que deben extraerse de la tierra mediante procesos mineros convencionales y desfavorables. Para el 2050, se espera que la demanda de metales básicos y materiales críticos aumente cinco veces. Más demanda significa más producción, lo cual implica que la industria minera tendrá que adaptarse para cumplir los crecientes objetivos de emisiones.

Muchos operadores mineros globales se comprometieron a reducir sus emisiones de carbono en un 45 % para 2030 y a lograr las cero emisiones netas para el 2050. Alcanzar esos objetivos requerirá el uso de energía renovable, un cambio de paradigma en la industria y, lo que es más importante, adaptar y mejorar los Centros de Operaciones Remotas Integradas (IROC, por sus siglas en inglés), con el fin de optimizar y apoyar la descarbonización.

Los IROC, que ya se están usando para acceder a datos en tiempo real que permiten monitorear, controlar y gestionar las operaciones en varios terrenos, pueden adoptar fácilmente nuevas capacidades para respaldar las complejidades de las tecnologías y los procesos de reducción de emisiones.

En las operaciones mineras tradicionales, la carga y el traslado representan el 50 % de las emisiones de CO2. El 50 % restante proviene del procesamiento (21 %), el transporte (18 %), las voladuras (6 %), la mezcla y el apilamiento (4 %) y la perforación (1 %).

• ¿Cómo podrán las minas producir más y al mismo tiempo reducir las emisiones? Estos son los principales enfoques que las mineras deben considerar:
• Optimización de procesos: se usan datos que ya se están registrando y monitoreando para crear gemelos digitales y modelos de aprendizaje automático que aceleren la eficiencia y el valor sustentable.
• Cambio a energías renovables: se crean modelos dinámicos de las maneras en las que la energía limpia y renovable, incluida la energía eólica, solar y nuclear, pueden integrarse a las redes de energía y cumplir con los ciclos de demanda.
• Optimización de la gestión de los equipos: se usan datos, análisis y automatización para optimizar la programación, la dirección y el mantenimiento.
• Reemplazo de los vehículos a diésel por vehículos a hidrógeno o eléctricos a batería.
• Reformulación de los métodos de minería (por ejemplo, triturar a boca de pozo y trasladar en cintas transportadoras para reducir el uso de camiones de carga, lo que genera una reducción neta de emisiones).

Sin duda, estos cambios aumentarán la complejidad de las operaciones mineras. Cada uno de ellos tiene el potencial de afectar la dinámica de la cadena de valor (por ejemplo, creando cuellos de botella) y requerirá procedimientos operativos nuevos. No obstante, la mejora continua es una característica fundamental del IROC, que le permitirá adaptarse a una cantidad inédita de nuevas tecnologías que se adoptarán para permitir la descarbonización. Los IROC son ideales para lo siguiente:

• Respaldar la colaboración en toda la cadena de valor: fomentando asociaciones entre los proveedores externos de energía y los proveedores de tecnología, a la vez que responden a las demandas de los productores de metales en vías de descarbonizarse.
• Optimizar el desempeño y la eficiencia: los IROC pueden ayudar a crear soluciones que reduzcan el consumo de energía, mejoren las tasas de recuperación y usen en forma óptima los flujos de desperdicios.
• Gestionar la electrificación y las fuentes de energía renovables: colaboración más estrecha con los operadores de red y optimización de las operaciones que tienen más limitaciones y volatilidad.

Está claro que es imprescindible planificar una minería sustentable. Pero lograrla puede ser difícil. Desde el punto de vista de los objetivos, debemos integrar la mentalidad sustentable a las operaciones cotidianas. Los planes de producción y energía deben estar alineados y los líderes y operadores deben entender los objetivos. Deben trabajar en forma sustentable, no solo optimizando el producto en términos de producción y calidad, sino en otros aspectos que incluyan los impactos ambientales, sociales y administrativos (ESG, por sus siglas en inglés). El aumento que se espera en la demanda de metales probablemente incremente el riesgo de daño ambiental y social. La integración de datos del IROC puede mejorar la comunicación entre las partes interesadas, los inversores, los líderes de la comunidad y los residentes, reducir los impactos negativos, aumentar el desarrollo local y reforzar el cumplimiento y la seguridad.

Hatch cuenta con los conocimientos y la experiencia para ayudar a los operadores mineros a equilibrar la reducción de emisiones con la producción. Ofrecemos herramientas especializadas y aceleradores, como nuestro Diagnóstico de Valor del IROC, que les permite a los clientes ejecutar las operaciones de forma más efectiva y obtener un valor sostenido de su IROC.

Durante un reciente proyecto de flotación de zinc, nuestro cliente logró producir más metal sin aumentar las emisiones. Hatch usó un gemelo digital y técnicas de aprendizaje automático para identificar una significativa mejora de recuperación del 0,8 % en un corto período de tiempo.

Hay oportunidades similares de optimizar sus operaciones mineras.

Ya sea que desee modernizar y expandir su IROC existente o crear uno nuevo, nuestro enfoque comprobado podrá ayudarlo a transitar el camino hacia un futuro más verde, limpio y descarbonizado.