Evaluación del impacto de los mecanismos de financiación federales en la cadena de valor de vehículos eléctricos de Norteamérica: parte 1

El gobierno de Biden sigue llevando adelante su agenda de avance económico, energía limpia y seguridad nacional, pero han surgido interrogantes clave sobre la implementación —y el impacto— de los mecanismos establecidos por las políticas federales durante los últimos dos años. La electrificación del transporte y la localización de la cadena de valor de las baterías han demostrado ser particularmente complejos, ya que las tensiones geopolíticas y la presión económica doméstica se combinan con los desafíos específicos de desarrollar un ecosistema nuevo de fabricación de estos vehículos.

Sin embargo, las perspectivas para la adopción de vehículos eléctricos son cada vez más optimistas en Norteamérica, con proyecciones que van del 30 al 50 por ciento, con base en las ventas de vehículos nuevos para 2030. Los $920 mil millones de dólares que este gobierno colocó en inversiones federales, entre la Ley para la Reducción de la Inflación (Inflation Reduction Act, IRA) y la Ley de Inversión en Infraestructura y Creación de Empleo (Infrastructure Investment and Jobs Act, IIJA) ya generaron desarrollos importantes en el sector privado en toda la cadena de valor de vehículos eléctricos; desde la materia prima hasta la producción de baterías, las partes interesadas de la industria han anunciado proyectos a gran escala que están alineados con los objetivos más amplios de tercerización de actividades a países limítrofes y crecimiento económico. En 2022, las automotrices anunciaron una inversión planificada de $73 mil millones de dólares en fábricas de baterías, y la asignación de montos similares para iniciativas de abastecimiento e innovación tecnológica.

Aun así, las inversiones federales traen consigo importantes complicaciones, que van desde los regímenes de control de fabricantes hasta la obtención de permisos y consideraciones diplomáticas. Para garantizar una implementación exitosa será necesaria una coordinación muy precisa entre las agencias, los gobiernos y los diferentes sectores de la industria, con el fin de lograr el impulso requerido para apoyar la descarbonización durante la próxima década.

Los requerimientos de materiales para baterías de la Ley para la Reducción de la Inflación

La IRA puede considerarse como el impulso más favorable para el ecosistema de vehículos eléctricos en Norteamérica, pero también es, posiblemente, el más complejo en términos de implementación. En particular, deben aclararse los detalles sobre la elegibilidad para crédito fiscal para vehículos eléctricos basada en materiales críticos y componentes para baterías para que los fabricantes avancen con sus proyectos y hagan las inversiones planificadas.

La versión definitiva de las normas del Departamento de Hacienda y las pautas del Servicio de Ingresos Públicos (IRS, por sus siglas en inglés) —que originalmente se esperaban para diciembre y estarán listas en marzo— vincularán el crédito de 7.500 USD a requerimientos de minerales críticos y de componentes de baterías, y cada requerimiento estará asociado con la mitad del crédito total.

Requerimiento de minerales críticos: exige que una parte de estos minerales se extraigan o procesen en Estados Unidos, o en un país con el cual Estados Unidos tenga un tratado de libre comercio, o bien, que se trate de material reciclado en Norteamérica. Esta parte aumenta 10 por ciento en forma anual, desde un 40 por ciento en 2023 hasta alcanzar el 80 por ciento para el 2027.

Requerimiento de componentes para baterías: al menos la mitad de los componentes de las baterías de los vehículos —incluso las celdas y módulos— deben fabricarse o ensamblarse en Norteamérica a partir del 2023. Esta cantidad aumenta a 60 por ciento en 2024 y 2025, y luego gradualmente al 100 por ciento para 2029.

La ambigüedad en torno a estos requerimientos —las pruebas para determinar el contenido doméstico y las medidas que deben adoptar las automotrices para cumplirlos— han generado mucha especulación en cuanto a la elegibilidad. La respuesta del Departamento de Hacienda de publicar un documento técnico a fines de diciembre y solicitar más opiniones sobre la implementación solo generó más dudas.

Las principales automotrices pidieron públicamente una interpretación clara del Departamento de Hacienda y el IRS. Varias de ellas afirmaron específicamente que las cadenas de suministro actuales no son suficientes para cumplir con la demanda a corto plazo; de hecho, los plazos ambiciosos que establece la IRA exigirán cierta flexibilidad en la interpretación.

Además, muchos gobiernos extranjeros han criticado las normas más amplias de crédito fiscal, las cuales constituyen una barrera no arancelaria para la importación de artículos que van desde minerales para baterías hasta componentes y vehículos ensamblados en Europa y Asia.

Las partes interesadas también expresaron su inquietud sobre los regímenes de aplicación que serán necesarios para supervisar los informes y cumplir con cada requerimiento, lo cual implica una gran cantidad de consideraciones regulatorias, tanto para el sector público como para el privado.

Las demoras en la publicación de las pautas y los detalles sugieren que tanto Hacienda como el IRS están ponderando en detalle las dudas que expresaron las ensambladoras automotrices, los fabricantes de baterías, los intereses mineros y los gobiernos extranjeros. Finalmente, cuando la información se publique a fines de este mes, se espera una respuesta significativa de la industria, que puede llevar a anunciar —o reevaluar— los proyectos de capital y los objetivos de las estrategias de abastecimiento generales.

Cómo puede ayudarlo Hatch

Nuestro equipo de soluciones para baterías ha trabajado con clientes de toda la cadena de valor— desde productores de materias primas hasta fabricantes de baterías y vehículos— para evaluar, optimizar e implementar iniciativas estratégicas y proyectos de capital importantes que aprovechen las oportunidades de financiación federal teniendo en cuenta los requerimientos. Estamos muy orgullosos de brindar conocimientos técnicos y excelencia en consultoría de gestión, y de nuestro enfoque colaborativo para lograr resultados accionables.

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