Información actualizada: la forma en que la COVID-19 está cambiando nuestra manera de trabajar

By Darren Wisher | 30 de septiembre de 2020

En respuesta directa a la COVID-19, ciudades y regiones de todo el mundo establecieron medidas de aislamiento en los primeros meses del año, en un intento de detener la propagación del virus. La incertidumbre era cada vez mayor y los gobiernos, los negocios y las personas se vieron forzados a adaptarse a las nuevas formas de trabajar, además de cambiar rápidamente las estrategias y los planes de negocio establecidos para responder a un panorama nuevo y en constante cambio.

Para entender mejor el impacto de la COVID-19, Hatch realizó una Encuesta Breve a algunos de nuestros clientes más cercanos, para determinar cómo las organizaciones, las regiones y los sectores están respondiendo a la pandemia. Nuestra encuesta evalúa cómo han respondido diferentes organizaciones del Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Sudáfrica, e identifica y comparte las innovaciones apenas aparecen, en la sección de resumen de los resultados. El objetivo de la encuesta también es averiguar las perspectivas para el futuro, es decir, cómo podría ser el camino hacia la recuperación y cómo las organizaciones ajustan sus actividades para responder.

Cuando las organizaciones que encuestamos reflexionaron sobre su respuesta inicial a la COVID y comenzaron a pensar en sus planes a futuro, nuestra investigación reveló que surgían tres temas diferentes: el impacto, la respuesta y la recalibración.

El impacto

El sentimiento general parece sugerir que, si bien el efecto de esta pandemia ha sido profundo, hay motivos para ser optimistas sobre cómo será nuestro mundo después de la COVID-19. Esto se observa no solo en el corto plazo, en la forma en la que las organizaciones se adaptaron en un primer momento, sino también en sus perspectivas a largo plazo.

Cerca del 70 % de los encuestados dijo que la COVID tuvo un efecto bastante significativo o significativo en las operaciones en los primeros meses. Sin embargo, después de este período de ajuste, la mayoría pudo continuar con sus operaciones, aunque esto dependió en gran medida del sector y el tipo de trabajo. Un cuarto de las organizaciones encuestadas (en su mayoría, organizaciones del sector público, como gobiernos municipales y agencias de tránsito) afirmó que sería necesario "un ajuste muy significativo" de sus ambiciones a largo plazo. Un aspecto positivo es que ninguna de las organizaciones encuestadas manifestó temor a cerrar.

La respuesta

Nuestra investigación ha demostrado que la naturaleza repentina de la pandemia fue el catalizador para que muchas organizaciones adoptaran, desarrollaran e invirtieran en nuevos sistemas digitales, dado que las personas comenzaron a trabajar desde sus casas.

Las tecnologías digitales se volvieron comunes en todas las organizaciones y le están permitiendo al personal tomar mejores decisiones más rápido. Se observaron mejoras en la productividad gracias a los nuevos flujos de trabajo y a que se mejoraron las cualificaciones del personal. Las organizaciones de todo el mundo reconocen este cambio positivo en la cultura y notan que se generó más confianza entre los equipos y las compañías.

La recalibración

A pesar de los desafíos, hay optimismo sobre el futuro. Muchas organizaciones destacaron que no habían cambiado sus ambiciones a largo plazo, pero que el camino hacia el éxito podría ser distinto al proyectado antes de la COVID.

Al referirse a las crisis globales previas, específicamente la del 9/11 y la Crisis Financiera del 2008, muchas organizaciones reflexionaron sobre cómo el hecho de haber superado esos desafíos les permitió salir fortalecidas a largo plazo. De forma similar, y aunque los desafíos actuales no terminaron, la mayoría de las organizaciones tiene una perspectiva optimista acerca del futuro, con un mayor enfoque en la sustentabilidad y la resiliencia de sus negocios. La COVID les dio relevancia a muchas inequidades sociales. En respuesta a esto, las empresas encuestadas piensan que también es fundamental construir una sociedad más inclusiva, enfocándose en una recuperación que tenga en cuenta la equidad y la igualdad.

Mientras nos integramos a esta nueva normalidad y planificamos cómo serán los negocios tras la COVID, esperamos que estas transformaciones en el trabajo den lugar a cambios mayores y duraderos en todo el entorno urbano. El efecto dominó de estos cambios fundamentales en los patrones de trabajo tendrá enormes efectos potenciales en los espacios urbanos y su uso en los próximos meses y años. Nuestra investigación ya está notando el cambio. Ya estamos viendo un impacto significativo en el uso de la tierra y la creación de espacios, el tránsito y los traslados, los patrones de gasto de los consumidores y la ubicación de los servicios de venta minorista y gastronomía y hotelería. Seguiremos monitoreando estas tendencias emergentes durante los meses y años venideros.

Si desea ver un análisis más exhaustivo de la encuesta, descargue nuestro informe o consulte este texto para ver un resumen de los resultados o comuníquese con Darren Wisher, Director Global de Soluciones Urbanas.