El futuro de la gestión de desechos de minas: cómo las soluciones innovadoras nos ayudan a operar de maneras más sustentables

Cada año, las operaciones mineras generan grandes volúmenes de desechos de minas, entre ellos los relaves. De acuerdo con el Proyecto de Minería, Minerales y Desarrollo Sustentable (MMSD, por sus siglas en inglés) del Instituto Internacional para el Medio Ambiente y el Desarrollo (IIED por sus siglas en inglés) en el mundo hay aproximadamente 3500 instalaciones activas de desechos de minas, que consisten en vertederos de residuos de rocas y embalses de relaves. Se calcula que la generación global de desechos proveniente de la producción principal de metales y minerales es de más de 100 mil millones de toneladas por año y que aumenta de manera exponencial debido a la disminución constante en la ley de los minerales.

Para darnos una idea de ese volumen: mil millones de toneladas de agua podrían llenar 400.000 piscinas olímpicas. Imaginen el número de piscinas que podrían llenarse con 100 mil millones de toneladas de desechos de minas. Además, al igual que el agua de una piscina, los desechos producidos por las instalaciones de procesamiento de metales y minerales necesitan ser contenidos. La manera en que la industria minera administra los relaves es de suma importancia para la producción segura y sustentable de los metales y minerales de todo el mundo, y para la salud de nuestro planeta en general.

Como empresa socialmente responsable, debemos asegurarnos de actuar con transparencia y lograr que las partes interesadas clave se comprometan con las comunidades en las que trabajamos, comprendiendo sus preocupaciones y protegiendo a sus habitantes, sus tierras y sus medios de vida. Es imprescindible que les informemos a las comunidades acerca de las tecnologías que se van a utilizar para contar con instalaciones seguras durante todo el proceso y después del cierre. Además, debemos lograr que las comunidades se involucren desde el inicio del proyecto, establecer confianza y alentarlas a que participen activamente.

¿Qué son los relaves?

Los relaves son un subproducto derivado de la extracción de minerales y metales valiosos. Cuando salen de la planta, generalmente toman la forma de lodo líquido hecho de partículas finas de mineral que se crean cuando los minerales extraídos se trituran, muelen y procesan. Algunos de ellos, que se almacenan en estanques, se extienden por cientos de hectáreas. En inglés se los denomina "tailings" en alusión a que representan el final o la cola ("tail-end") del proceso.

Dado que los hallazgos del MMSD se publicaron en el año 2002, la industria de metales y minerales ha estado bajo una enorme presión para mejorar su desempeño social, evolutivo y medioambiental. En su libro del año 2011, Waste (Desechos), Geoffrey Blight señala que los desechos de minas y su almacenamiento admisible desde el punto de vista ambiental constituyen el problema de desechos más grande del planeta. El índice de producción de desechos de minas, que se ha acumulado durante miles de años, ha aumentado al ritmo de crecimiento de la población humana. Afortunadamente, seguir el ritmo de crecimiento de la población es un avance en la tecnología para ofrecer soluciones nuevas e innovadoras para enfrentar este desafío.

Existen distintas formas nuevas de administrar el almacenamiento de relaves, desde la contención del lodo hasta el apilado en seco. Identificar el método más apropiado para el almacenamiento de relaves es fundamental para segurar que las operaciones sean seguras y sustentables. Se deben tener en cuenta numerosos factores desde el inicio, como la topografía local, el índice de precipitaciones, la actividad sísmica, el tipo de mineral que se extraerá y la proximidad con áreas pobladas. No hay una única solución para todo, dado que cada instalación de almacenamiento de relave es única y porque no todos los relaves son iguales.

Antes que nada, las instalaciones de gestión de desechos de minas deben designarse y administrarse teniendo en mente la fecha de cierre y las expansiones desde el inicio. Es necesario que estas instalaciones operen de manera adecuada incluso después del cierre, a través los cambios en el medio ambiente y después de que haya finalizado la producción de minerales. Incluso deben estar construidas con la flexibilidad necesaria para volver a abrirse si la vida útil de la mina llegara a extenderse. Se necesita un pensamiento crítico a largo plazo. Extender la vida útil de la mina puede ayudar a cubrir los costos de su propio cierre. Y con el cierre programado de cientos de minas para los próximos años, la necesidad de contar con esta experiencia es inminente.

Factores competitivos como los costos, el medioambiente, la seguridad y la viabilidad técnica ocupan el primer lugar en la planificación cuando las organizaciones mineras hoy invierten en nuevos sistemas de relaves o modernizan los existentes. El bloqueo del agua de procesamiento y el aumento en las extensiones de terreno que el manejo de relaves convencionales requiere nos están forzando a encontrar sistemas más avanzados. Estas nuevas tecnologías ofrecen importantes beneficios en términos de sustentabilidad ambiental y seguridad para la comunidad y los empleados. Están diseñadas para maximizar la recuperación del agua y minimizar nuestro impacto ambiental.

La gestión de los desechos de minas continúa siendo un problema principal para la gestión de agua en los terrenos de las minas, desde el flujo hasta la calidad. La tecnología de desagüe de relaves ha surgido en muchos formatos en los últimos veinte años, como una opción prometedora para disminuir este desafío. Mediante el desagüe de los relaves, los materiales de desecho se pueden producir en mayor medida en su forma sólida (con consistencias que varían de ultra-gruesos a torta de filtrado) y construir en una pila llamada "pila en seco". El proceso de filtrado de relaves reduce el volumen de agua y mejora la estabilidad de las instalaciones.

Los relaves desaguados se encuentran entre las mejores tecnologías disponibles para la industria de hoy en día. No obstante, no es una solución universal. Los problemas como la generación de ácidos también son determinantes para encontrar la solución apropiada. Lo que pueden hacer es ayudar a crear un cambio de paradigma, donde lo que hoy se percibe como un desecho de mina inutilizable pueda reutilizarse en el futuro con un valor agregado. La posibilidad de reciclar los desechos de minas en recursos viables puede hacer que terminemos viendo a los relaves como parte de la solución para los recursos de menor nivel y de difícil acceso.

En el informe de seguimiento del proyecto de MMSD del IIED del año 2012 se identificó que ha habido un progreso desde los hallazgos iniciales. Se han producido avances técnicos en la toxicidad del agua y de los metales residuales, con regulaciones que lo respaldan, y el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM, por sus siglas en inglés) ahora cuenta con un conjunto de herramientas para planificar el cierre de una mina, con ejemplos existentes de procedimientos adecuados. Además, y esto quizás sea lo más importante, las organizaciones mundiales ahora trabajan juntas para encontrar soluciones. El ICMM, el Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas y los Principios para la Inversión Responsable se han reunido para crear una Revisión de Relaves Mundiales y establecer estándares internacionales. Con el compromiso en común de adoptar los mejores procedimientos globales en las instalaciones de almacenamiento de relaves, esto significa un avance, más allá de las pautas nacionales. La Revisión de Relaves Mundiales evaluará los procedimientos positivos actuales en la industria minera, entre otras, y revisará la evidencia y las lecciones aprendidas luego de fallas catastróficas.

Dado que somos uno de los productores de desechos más grandes del mundo, nos corresponde, como industria, trabajar juntos para encontrar nuevas maneras de operar de forma más sustentable. La tecnología nos da las herramientas; nosotros tenemos que hacer los que nos toca para determinar cuáles son las mejores soluciones para cada entorno. Al trabajar con nuestros clientes, debemos enfocarnos en todas las perspectivas de la estabilidad: procesamiento de minerales, geotécnicas, hidrotécnicas y geoquímicas, a fin de encontrar la mejor combinación de herramientas para resolver los desafíos particulares de cada terreno. Con una solución integrada y holística podemos reducir los desafíos que presenta la gestión de los desechos de minas.

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