La energía geotérmica: el eslabón perdido en la historia del litio

By Adel Muna | 17 de octubre de 2018

La zona del lago Salton, al sur de California, es uno de los puntos geotérmicos activos más grandes del mundo. La zona alberga un depósito de agua salobre (agua llena de minerales y sales disueltas) presurizado de forma natural, en el que la temperatura puede alcanzar los 600 ºF en lugares de hasta 6.000 pies de profundidad. La combinación de la geografía, la geología y la química hacen que la región sea ideal para la producción de energía térmica, algo que se está volviendo cada vez más importante en un mundo que necesita energía limpia y ecológica.

En términos simples, para producir energía, además del método de entrada de presión directa, una planta geotérmica hace circular el agua salobre caliente por un sistema de tuberías. Las tuberías atraviesan un depósito de agua fría, que se calienta y genera vapor, y este a su vez acciona una turbina para producir electricidad. Es un sistema de circuito cerrado, porque a medida que se enfría el agua salobre, se la redirige de vuelta al suelo para iniciar una vez más el proceso de calentamiento. Al asegurarse de que el depósito esté conectado de la manera adecuada, la producción es sostenida y continua, de modo que no hay peligro de que disminuya el recurso.

Las plantas geotérmicas requieren áreas geográficas con características específicas. En primer lugar, el suelo debe ser permeable. Los pozos de producción tienen que poder producir un caudal másico que pueda mantener el tipo de absorción de líquidos que el proceso necesita. Dado que el agua salobre se recicla y se devuelve al depósito tras usar su calor, el suelo debe ser lo bastante permeable como para permitir una reabsorción rápida. En segundo lugar se encuentra la geoquímica del agua salobre que circula por el sistema. Las características de las sales, los minerales y los elementos químicos que contenga deben ser aceptables para su uso. Si son demasiado tóxicos, puede ser muy costoso lograr que el agua salobre sea aceptable para su uso. En tercer lugar está la temperatura del gradiente geotérmico. La temperatura de la tierra se eleva a medida que aumenta la profundidad, pero el truco está en hallar las ubicaciones en las que podamos cavar lo bastante profundo como para acceder a la diferencia de calor que necesita el sistema para ser efectivo.

Esta zona de California (el condado de Imperial) ya estaba prestando respaldo a once centrales geotérmicas en la costa sur del lago Salton. Aun así, a pesar de los recursos abundantes y de la naturaleza renovable y reciclable de la energía geotérmica, la construcción de estas plantas había disminuido el ritmo debido a los costos elevados. Pero ahora que el estado se comprometió con un cien por ciento de energía limpia para 2045, hay argumentos sólidos para que haya más desarrollos geotérmicos.

La energía geotérmica es de "carga base". Fluye noche y día, en verano y en invierno. Las centrales que la aprovechan operarán durante décadas, de modo que pueden tener un papel importante si complementan y aprovechan las características de producción por ciclos de otros recursos renovables, en particular la energía solar y la eólica. El proceso de extracción selectivo del agua salobre geotérmica es rápido, tiene una intensidad de agua considerablemente menor y es compacto, sin necesidad de grandes estanques de evaporación, lo cual lo hace ideal para la extracción de litio.

El litio suministra energía a muchísimas cosas, desde celulares y computadoras a autobuses del sistema de transporte público. Las baterías recargables de iones de litio son fundamentales para la tecnología digital, que a su vez se convirtió en un elemento esencial para el funcionamiento del mundo de hoy. El valor del litio en todas sus formas (carbonato, cloruro e hidróxido) crece continuamente gracias a la industria de las baterías. La demanda sólo seguirá en aumento a medida que los fabricantes de automóviles de todo el mundo adopten los motores eléctricos a fin de que su negocio sea más ecológico y pueda cumplir con las regulaciones gubernamentales.

El uso de energía geotérmica para alimentar a una instalación completa es una manera en la que Hatch habilita nuevas tecnologías para la recuperación del litio. Esto también demuestra que es posible aprovechar lo mejor de ambos lados: la energía ecológica se usa para extraer litio, el cual es un mineral necesario para crear uno de los elementos fundamentales para almacenar energía eléctrica. A medida que la industria avanza con rapidez, tanto en magnitud como en tecnologías, la experiencia de Hatch en el ámbito del litio, nuestros conocimientos de ingeniería geotérmica y nuestra capacidad para tener ideas nuevas y diseños innovadores que resuelven los desafíos más difíciles de nuestros clientes crean una oportunidad única para nosotros.

Esta es la clase de oportunidad que un ingeniero puede buscar durante toda su vida. Una tecnología nueva, sin carbono, que no sólo reduce los desechos y ayuda a combatir el cambio climático, sino que también se puede usar para hacer un producto comercialmente viable y de mucha demanda. Es la mejor de las buenas noticias: una que promete seguir mejorando.